Colombia participó con 40 deportistas en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988.

“Los juegos olímpicos de 1988 serán recordados por los problemas políticos que generaron estas justas debido a la guerra fría entre la Unión Soviética y Estados Unidos, el terrorismo mundial en aumento y la no participación de Corea del Norte”.

Tras su excursión en tierras norteamericanas, los Juegos Olímpicos se llevaron a cabo por segunda vez es Asia y por primera vez en Seúl, Corea del Sur, y como era de esperarse fue un evento que genero preocupación en sus espectadores debido a los problemas políticos y sociales que ocurrían en la época y que ocurrieron en las anteriores justas olímpicas.

Seúl fue escogida para ser sede de estas justas olímpicas el 30 de septiembre de 1981, al ganarle a Nagoya, Japón, por 52 votos sobre 27. La decisión generó incertidumbre porque algunos países como la Unión Soviética, no tenían relaciones diplomáticas con el gobierno de Corea del Sur y los rumores de un nuevo boicot empezaron a presentarse por este motivo.

La situación se tornó más complicada, cuando en julio de 1985, Corea del Norte solicitó ser coanfitrión de los Juegos y puso en apuros al Comité Olímpico Internacional, quien estuvo negociando con Corea del Norte la posibilidad de acoger varias pruebas.

Esto fue una situación difícil, porque reclamaba además el mismo estatus de organizador que Seúl y el mismo número de pruebas deportivas, argumentando que el anfitrión no iba a ser capaz de terminar las obras de infraestructura requeridas para unas justas olímpicas. Ante la

negativa del Comité Olímpico Internacional, fue Corea del Norte la que decidió no asistir a los Juegos, pero cuando lo hizo, ya los países del bloque soviético habían confirmado su participación.

Finalmente fueron seis países los que no asistieron a la cita en Seúl: Corea del Norte, Cuba, Nicaragua, Albania, Etiopía y Seychelles, algunos de ellos por otros motivos diferentes. Los Juegos siguieron adelante y registraron la más alta participación de todos los tiempos, además fueron catalogados como los de mejor organización, hasta la fecha.

Frente a esta realidad, participaron 8.391 deportistas de 159 países, entre ellos Colombia, que llego con el objetivo de mejorar la gesta de cuatro años atrás, cuando gano una medalla de plata con el tirador Helmuth Bellingrodt Wolff.

El grupo de deportistas colombianos que viajaron a la ciudad de Seúl fue de 40 deportistas, 34 hombres y 6 mujeres, quienes compitieron en diez deportes. El abanderado de la delegación cafetera fue el tirador Jorge Enrique Molina.

 El mejor colombiano en estos Juegos Olímpicos fue el boxeador colombiano, de apenas 19 años, Jorge Eliécer Julio Rocha quien gano una medalla de bronce en la categoría de 51-54 kilogramos luego de haber vencido al boxeador japones Katsuyuki Matsushita y de perder la posibilidad de luchar por el oro tras perder contra el boxeador búlgaro Alexander Hristov, con el cual perdió en una polémica decisión.

 El triunfo de Julio Rocha fue tan destacado y reconocido a nivel nacional por ser el único deportista de la delegación colombiana en ganar una medalla en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988. De tal manera que esta medalla de bronce que obtuvo el boxeador colombiano no puede ser menos que exaltado como uno de los más grandes hechos en la historia del deporte colombiano.    

Por otra parte, los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988 tuvieron un gran significado, puesto que se habían enfocado en la reconciliación de los bloques de Oriente y Occidente, tras los boicots que había perpetrado el Bloque Occidental en 1980 contra los Juegos Olímpicos de Moscú, y posteriormente el Bloque Oriental en represalia por los Juegos Olímpicos de 1984, que tuvieron lugar en Los Ángeles.

 Sin embargo, Seúl logró trascender estos conflictos ideológicos y la discriminación racial en cumplimiento con los principios establecidos en la Carta Olímpica, y los Juegos sirvieron como ocasión para dar a conocer al mundo el estatus del desarrollo económico y tecnológico que había alcanzado el país, su cultura y tradición, y el alto potencial de la comunidad coreana.

Los Juegos Olímpicos de Seúl 1988 serán recordados también por la destacada participación de varios deportistas como Kristin Otto, de la República Democrática Alemana, quien se impuso en la natación, al ganar seis medallas de oro, como un hecho sin precedentes en la participación femenina de los Juegos Olímpicos.

Por primera vez en la historia de los Juegos Olímpicos, los tres medallistas en adiestramiento ecuestre fueron mujeres, la esgrimista sueca Kerstin Palm se convirtió en la primera mujer en participar en siete Juegos Olímpicos y el tenis de mesa regresó al programa olímpico, después de una pausa de 64 años.

Por otra parte, en estos Juegos Olímpicos se fue consolidando aún más la labor del voluntariado, registrándose la participación de 27.221 voluntarios y los medios de comunicación evidenciaron el mayor número de registros en toda la historia olímpica hasta la fecha con 11.327 periodistas en total, 4.978 de prensa escrita y 6.353 de radio y televisión.