Después de 19 años bajo el mandato del ruso Roman Abramóvich, el Chelsea se vio inmerso en un cambio de propietario drástico. Llegó el estadounidense Todd Boehly junto con su consorcio Clearlake Capital y otros agentes. Y con este cambio de dueño, se venía una transformación institucional. Y todo comenzó de una manera muy mal vista por parte de los seguidores del club inglés, el despido de Tomas Tuchel.
Todo el mundo del futbol quedó atónito al ver que la nueva directiva se deshacía del técnico alemán que había guiado al conjunto londinense a ganar su 2° Champions League (además de la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes) ejerciendo un futbol muy atractivo y eficaz. El argumento de Boehly fue que Tuchel no era el indicado para liderar este proyecto enfatizado en el desarrollo de jóvenes mediante un proceso a largo plazo. Se decantó por contratar a Graham Potter, quien con el Brighton & Hove Albion, había dejado muy buenas impresiones. Pero el rendimiento del entrenador inglés dejó mucho que desear, por lo que meses después de su arribo a Londres, fue despedido.
Nadie comprendía las decisiones del multimillonario estadounidense ya que comunicaron que Bruno Saltor (asistente técnico de Graham Potter) sería el entrenador interino hasta que se encontrara a uno permanente. Pero lo más ‘cómico’ es que dirigió únicamente 1 partido puesto que tiempo después se confirmó a Frank Lampard como entrenador temporal hasta final de temporada.
4 entrenadores en una temporada. Nadie creía lo que estaba pasando en el Chelsea. No había estabilidad en el banquillo, los fanáticos del equipo no estaban conformes con las decisiones de la directiva, los jugadores no rindieron lo esperado (mayormente por el cambio de entrenadores).
Hasta que se oficializó un secreto a voces, Mauricio Pochettino es designado como entrenador en jefe del Chelsea. Director Técnico con amplia experiencia no solo en el cargo en general, sino también en Premier League y sobre todo en un equipo londinense con jóvenes necesitados de desarrollo.
Hay que recordar que Pochettino entrenó al Tottenham entre 2014 y 2019 donde potenció a jugadores jóvenes como Harry Kane, Son Heung-min o Delle Alli. Ahora, tiene un reto mayor, ya que ahora estará liderando un proyecto en una institución que está acostumbrada a ganar títulos regularmente y con mayor cantidad de jugadores jóvenes de los que, hasta el momento, se espera mucho.
Ahora, solo queda esperar qué decisiones toma el técnico argentino en cuanto a entradas y (sobre todo) salidas de jugadores, ya que el Chelsea cuenta con bastantes jugadores en su plantilla y necesita ahorrar salarios. Esta decisión de contratar a un técnico que ha entrenado a un rival directo no ha contentado a muchos seguidores de los ‘Blues’, pero como mencionó un periodista de The Athletic, a los hinchas del Chelsea solo les importa ganar, no importa de qué manera (siempre y cuando no sea ilegal).